Aumentan los requisitos para obtener una hipoteca por la pandemia

Es un hecho lógico que los bancos busquen clientes con cierta solvencia económica para conceder tanto créditos como hipotecas. No es de extrañar como esta tendencia, sigue en aumento desde que la crisis inmobiliaria hiciera estragos en España allá por el 2009.

La solvencia de un cliente es un requisito fundamental para que la concesión de una hipoteca se realice de forma satisfactoria. La protección frente a la morosidad es quizá una de las grandes preocupaciones de los bancos, ya sea en hipotecas de viviendas como en créditos personales.

Por ello, en los últimos años hemos visto como los requisitos para obtener una hipoteca han ido en aumento. Hace unos años, optar a una hipoteca era bastante sencillo pero conforme aumentó la morosidad debido a la crisis, las cosas se han ido endureciendo.

Los autónomos son los que más complicado lo tienen, ya que la inestabilidad de los ingresos fijos hace dudar a muchos bancos que prefieren contratos indefinidos. Es el caso de los funcionarios, un perfil que hace las entidades bancarias relajen sus pretensiones y ante los que ofrecen buenas condiciones ante el bajo peligro de morosidad.

Este aumento de requisitos no solo ha sido fruto de una crisis de hace diez años sino que la pandemia del coronavirus también ha afectado de forma evidente.

Cuando aparece una época donde los puestos de trabajo son inestables y los ingresos de las familias se deterioran, las dudas se ciernen sobre los préstamos personales y las hipotecas.

Los expertos en hipotecas ya preveían este endurecimiento desde que se declarase el estado de alarma, ya que sectores como la hostelería, el turismo, el entretenimiento o el comercio iban a reducir sus ingresos de forma drástica.

La época que estamos viviendo tiene relación directa con la incertidumbre, por lo que los bancos no son capaces de prever cifras y resultados de morosidad. Lo que sí es evidente es que el dinero y la compraventa de inmuebles va a crecer durante los próximos años derivada de las herencias.

Esto implica que muchas personas jóvenes reciban dinero para dar entradas para la compra de un piso, lo que puede aumentar la solicitud de hipotecas. Ante los requisitos tan fuertes por parte de los bancos, no es de extrañar que las hipotecas se concedan únicamente si hacemos un entrada fuerte para la compra de la vivienda.

En líneas generales, los bancos priorizan a aquellas familias que tienen ingresos superiores a 60.000€ anuales. Y, si es posible, aumentar de un 20% a un 30% la entrada para la vivienda, eliminando por supuesto, las hipotecas al 100% tan solicitadas por gente joven con pocos ahorros.