Cuando una empresa entra en crisis ,muchas veces sus gerentes no saben por qué ocurre tal situación y qué variables han sido afectadas. Por ello, es fundamental conocer algunas estrategias que se pueden aplicar para que la sociedad sea viable y pueda resolver su situación de insolvencia.
Asimismo, buscar la forma de reorganizar la compañía ayudará a corregir los errores administrativos que la han llevado a tomar decisiones equivocadas. El objetivo es buscar la conservación de la empresa o, en su defecto, el camino adecuado para cerrarla y comenzar nuevamente sin deudas.
Recurrir a un concurso de acreedores
Si una empresa no puede hacer frente a las deudas adquiridas con sus acreedores, debe explorar las diferentes opciones para evitar el cierre definitivo. Una estrategia que se puede aplicar es el concurso de acreedores, la forma más idónea en la que una compañía puede enfrentar una situación económica complicada al no tener bastante liquidez para cumplir con sus obligaciones. Este puede ser un concurso de acreedores voluntario, solicitado por la propia compañía, o forzoso, cuando son los acreedores los que presentan esta demanda.
De cualquier manera la empresa siempre será la más beneficiada, ya que el principal objetivo del concurso es salvarla. Sus pagos se flexibilizan y, por consiguiente, también lo hacen los plazos para facilitar el reintegro de la deuda adquirida y así continuar con su actividad comercial. A continuación se presentan las fases del concurso.
- Fase común: En ella se solicita el concurso, se emite la resolución y se determinan la masa activa y pasiva para clasificar las deudas adquiridas.
- Fase de convenio: Donde se reciben las propuestas del convenio que presentan el deudor y los acreedores.
- Fase de liquidación: En caso de no llegar a un convenio, aquí se venden los bienes que tiene el deudor para cubrir la mayor deuda posible.
- Fase de calificación: Se declara el concurso como culpable o fortuito. Esto dependerá de si se comprueba dolo o culpa del deudor.
Concurso express para cierres inmediatos
El concurso express es una opción a la que se puede optar cuando una empresa carece de bienes para poder cumplir con las deudas adquiridas, lo que supone la finalización de la sociedad de forma inmediata.
Esta modalidad del concurso de acreedores es menos costosa y más rápida, ya que no es necesario un administrador concursal que asuma el control de la sociedad ni se ejecuta la fase de calificación, ya que no se tienen dudas de la responsabilidad del deudor. Una vez que se dicte la conclusión del concurso, se debe realizar las siguientes acciones que llevarán al cierre definitivo de la compañía:
- Liquidación inmediata de la sociedad.
- Se reparten a los acreedores los bienes liquidados.
- Se anula la sociedad y la actividad empresarial.
- Se cancela el registro mercantil de la compañía.
Qué es interim management
Una estrategia gerencial comúnmente usada en las empresas que se encuentran en proceso de crisis son los directivos de transición. Estos gestionan acciones como ejecutivos de la empresa para cumplir con un objetivo clave durante un periodo de tiempo específico, así se define lo que es interim manager. En concreto, cuando se necesita realizar un cambio o ejecutar etapas donde el equipo gerencial no tiene el tiempo o las competencias necesarias para tomar las decisiones correctas, se contrata un profesional senior para resolver esas situaciones, minimizando todo riesgo posible.
Esta figura permite obtener soluciones a corto plazo, lo que incurre en la disminución de gastos administrativos y la desvinculación inmediata sin acarrear con costes asociados. Como ventaja, el interim manager dispone de talento humano de forma inmediata y efectiva, además ofrece la seguridad de acelerar todo proceso de cambio dentro de la empresa obteniendo los mejores resultados.
La figura de un director financiero externo
Son muchos los beneficios que se pueden obtener al contar con un director financiero externo. A través de él, se puede diagnosticar la situación económica de la empresa, detectar oportunidades para el crecimiento y conocer las amenazas a las cuales se enfrentan en procesos de crisis. Igualmente se puede ver cómo un interim manager, un directivo con un talento negociador muy buscado cuando la empresa requiere optimizar procesos para obtener mayor rentabilidad.
Su contratación tiende a complementar la planificación financiera y la toma de decisiones a nivel económico que mantendrá las funciones de este departamento en miras a nuevos proyectos de inversión y al diseño de políticas que se ajusten a la actividad comercial de la empresa para crecer y consolidarse.