Ciclos formativos frente a estudios universitarios

Estar bien formado es quizá uno de los requisitos más importantes para encontrar trabajo. A esta conclusión han llegado miles de expertos tras consultar los estudios de empleo en España, un país que cada vez se acerca más hacia los datos de formación del resto de Europa.

En los años 70 y 80, la formación especializada era muy reducida, conforme han ido pasando los años, encontramos una gran variedad de cursos de formación que enseñan a los alumnos sobre materias concretas, algo básico para continuar un crecimiento profesional.

Pero, ¿qué elegir para encontrar trabajo rápido: estudios universitarios o ciclos formativos? Los ciclos formativos han resultado ser mucho más prácticos y, la mayoría de empresas, valora mejor a estos profesionales que a los universitarios.

Según el último estudio realizado por la empresa temporal Adecco, el 42.26% de las ofertas laborales solicita una titulación de ciclos formativos frente a un 38.5% que requiere unos estudios universitarios reglados. Estos datos no son una sorpresa para muchos, ya que es de sobra conocido la saturación de empleos universitarios en los últimos años.

El panorama laboral ha cambiado por completo durante los últimos años, apartando a los estudios universitarios y delegandolos a un segundo plano.

Según los cálculos de la agencia europea Cedefop, un 65% de los empleos demandados en España dentro de 10 años será para usuarios con ciclos formativos o FP medios. Sin embargo, los empleos universitarios ocuparán tan solo el 35% restante en unas cifras que no todo el mundo es capaz de asimilar.

Siempre nos han intentado inculcar que debemos estudiar un grado o carrera universitaria para tener más opciones laborales. Pero, ¿es esto cierto? ¿Como es posible que los ciclos formativos lleven ventaja en España?

Un ejemplo lo vemos con los ciclos formativos técnicos o de publicidad. El ciclo formativo de preparación online y reglado de trabajo publicitario es un claro ejemplo de cómo un grado medio en publicidad es capaz de otorgar mas posibilidades de empleo que una carrera universitaria.

La carrera de marketing se ha de complementar con algún máster específico pero los ciclos formativos son rápidos, prácticos y permiten al alumno insertarse en el mundo laboral prácticamente de forma inmediata. Esta rapidez es una gran ventaja frente a los alumnos universitarios que, normalmente, no se incorporan al mundo laboral hasta lo 25 años.

Otro ejemplo lo podemos ver en las carreras técnicas de informática y programación. En la actualidad vemos como los ciclos formativos de desarrollo de aplicaciones están más demandados que nunca porque permiten a los alumnos obtener un empleo de forma rápida y segura.

Las carreras laborales de estos profesionales están garantizadas, ya que son perfiles muy demandados en la actualidad.

No quiere decir que un ingeniero de informática no tenga posibilidades laborales, al revés. Si no que si queremos comenzar a trabajar cuanto antes nos sirve un ciclo formativo, unos estudios practicos que enseñan los entresijos de una profesión de forma completa y funcional.